miércoles, 23 de noviembre de 2011

“APARICIÓN DEL PRIMER NÚMERO DE LA REVISTA COROTO” + UNA ENTREVISTA (“COROTO ES PURA ARTESANÍA”).


Portada 1: Manolo Campoamor.

Portada 2: Erick Estrada Bellman.

Directores de la revista Coroto.
De izquierda a derecha: Daniel Centeno, Diego Bustos y Daniel Ríos.

“APARICIÓN DEL PRIMER NÚMERO DE LA REVISTA COROTO”

Nos llega al correo -desde El Paso, Texas y gracias a Daniel Centeno- la siguiente información sobre la aparición de una nueva revista de literatura denominada “COROTO”. A través de su página web: revistacoroto.com nos enteramos que a partir desde este viernes 25 en la FIL de Guadalajara se podrán encontrar algunos ejemplares en el stand de la Universidad Autónoma de Nuevo León. En este primer número de lanzamiento podemos apreciar los trabajos -entre inéditos y no- de Antonio Gamoneda, Juan Gelman, Justo Navarro, Juan Villoro, Alberto Salcedo Ramos, Jonathan Coe, Inma Chacón, Ana María Shua, etc. En buena cuenta una revista con más de un artículo de creación y arte que lo sitúa en un lugar expectante, algo más que interesante. A continuación, rebotamos una entrevista realizada a los jóvenes directores de “Coroto” no sin antes felicitarlos por tan loable esfuerzo y desearles lo mejor en esta difícil empresa. Abrazos. (C.P.Q).

“COROTO ES PURA ARTESANÍA

¿Qué sale de mezclar un periodista, un videasta y un economista? Coroto, y no es albur, más bien es testarudez, diversidad, oficio. Y es que lo que más impresiona de este proyecto literario es  que, cuando el amor por la literatura es más grande que la pobreza, no importan vientos ni mareas. “Nos lanzamos al vacío, como kamikazes, a hacer una revista por placer”, bromea Daniel Centeno (DC), periodista venezolano y uno de los tres padres de la nueva revista literaria Coroto que ha nacido en El Paso, Texas.

Por: Martín Letona

El primer número de Coroto está en imprenta. Los lectores tendrán en sus manos una interesante propuesta, posiblemente a la altura de un disco de colección, de esos que solo hacen un centenar de copias. Esas páginas están sazonadas con firmas de escritores ganadores del Premio Cervantes; con una exclusiva literaria japonesa que por primera vez verá luz en un medio en idioma español; con piezas memorables de Juan Villoro y Alberto Salcedo Ramos. Otros nombres: Daniel Riera, Myriam Moscona, María Auxiliadora Álvarez, Inma Chacón, Justo Navarro, Diego Paszkowski, Rodrigo Hasbún, Andrés Burgos, Dulce Chacón, Erick Estrada Bellmann, Manolo Campoamor y Ana María Shua.

Parir Coroto no ha sido fácil. Los contratiempos que Daniel Centeno y su compañeros colombianos, el videasta Daniel Ríos (DR) y el economista Diego Bustos (DB), han tenido que enfrentar frustrarían al más asceta de los emprendedores. Sin embargo ya preparan un segundo número corotero.

¿Qué significa Coroto y cómo este nombre se relaciona con el sentido que desean dar a su revista?

DC: La palabra Coroto es próxima y tiene que ver con “artefacto”. Es un comodín que remite a un sentido lúdico. Queremos tener en ella “la mejor literatura”, sin importar géneros, pero no deseamos imponer una distancia con el lector. Pese a todos los sufrimientos por los que hemos pasado, esta revista significa un gozo y esperamos que sea lo mismo para la gente que la tenga en la mano.

DB: En la revista cabe cualquier literatura que cumpla con esa característica tan difícil de definir -“que sea buena”-, pero que todos sabemos de lo que estamos hablando cuando nos referimos a ella.

¿Cómo fue que dieron vida a Coroto?

DC: Comenzó así (imitando a Ríos, con acento típico de Medellín, y luego a sí mismo):
        Tenemozh que hazhcer la reviszhta.
        No, marico, yo necesito este semestre pa´scribir.
        No, ¡la hazhcemoszh!, ¡la  hazhcemoszh!

Y, luego, me metí en esta vaina, y no he escrito nada.

(Tanto Daniel Centeno como Daniel Ríos trabajaron juntos entre agosto de 2010 y junio de 2011 como editores de la Río Grande Review, una publicación auspiciada por la Universidad de Texas en El Paso, para los estudiantes del Departamento de Escritura Creativa).

DC: ¿Cómo se hace una revista? Bueno, antes tuvimos plata para hacer la RGR. Ahora estamos en plan cine independiente, pero en esa época era como si hubiésemos contado con el apoyo de Hollywood para pagar los efectos especiales. Ahí tuvimos contacto con escritores, editoriales, diseñadores, imprentas y un par de fundaciones de una manera bastante orgánica. Esa experiencia nos sirve ahora mucho. Por poner un ejemplo, la Universidad Autónoma de Nuevo León, que se interesó en el proyecto de Coroto, asumió la impresión y nos contactó con otros autores. Con ese apoyo solventamos uno de los gastos más significativos de la revista. El Consulado de México en El Paso nos ha ayudado a reunir otras firmas y fondos. El resto de dinero lo hemos conseguido con amigos, en kickstarter.com, y poniendo dinero de nuestros bolsillos. El resto es pura artesanía. Nosotros no tenemos oficina, ni impresora, nada. Cuando la gente vea la revista va a pensar que la pagó el Narco. Pero qué va, fue un We are the world, más bien.

DB: La idea básica es crear una revista que contenga “buena literatura”. Yo creo que el eslogan “literatura para llevar”, habla muy bien de esto: algo que esté siempre disponible para tener una buena experiencia de lectura.

¿Cómo determinan qué es una buena literatura?

DC: Bueno, que esté bien escrita, que no te dé sueño y que te deje algo valioso. Nuestro concepto de literatura es bastante amplio, creo. Anteriormente la revista en la que estuvimos no admitía que una crónica, una entrevista o una semblanza fueran tratadas como géneros literarios. Una vez una joven poeta nos criticó eso con bastante asombro… Ahora, intentamos hacer una revista de lo que nosotros consideramos es buena literatura. Pero eso también depende del punto de vista del lector de Coroto.

¿Cuál es la pretensión que buscan alcanzar con esta revista?

DR: Esta es una revista que privilegia el español porque es el idioma que manejamos los tres. Más que pretensión, lo que buscamos es desarrollar el gusto que nos quedó de la experiencia anterior. Y, modestia aparte, viendo que hicimos una buena labor, ¿por qué no seguir así si pensamos que servimos para esto? Aunque se nos acabe la gasolina o haya menos dinero… Pero ahí estamos. Creo que somos los primeros que, cuando hicimos la entrega de mando de la RGR, ya teníamos la sensación de que la cosa editorial no acababa en ese momento.

Los editores de Coroto aseguran que, en comparación a otros productos literarios que existen en la frontera, su revista se convertirá en un referente obligado de la misma para conocer de primera mano a los autores más representativos de Iberoamérica y de otras tradiciones. Daniel Centeno sostiene que, contrario a sus pares, ellos buscan “firmas ya consolidadas”. Por eso considera que Coroto “es una especie disco de remixes de autores profesionales de los libros, de lo que creemos es lo más excelso de la literatura”. Para Diego Bustos, esta diferencia lejos de ser una desventaja frente a publicaciones ya establecidas en la frontera, como la RGR que lleva 31 años de vida, es una ventaja: “entre todos podemos configurar la escena de El Paso como una ventana a la literatura contemporánea”.

DC: Coroto es un emprendimiento independiente. No hay una universidad o beca que nos respalde al ciento por ciento. Por ahora, sólo somos tres personas a las que nos gusta la literatura y nos lanzamos al vacío, como kamikazes, a hacer una revista por el simple placer de hacerla y hasta estamos poniendo dinero de nuestro bolsillo.

DB: Aun así, publicamos a dos premios Cervantes: Antonio Gamoneda (2006) y Juan Gelman (2007).

DR: Tenemos una parte de traducción donde colocamos un texto de Johnathan Coe y un cuento de Ryunosuke Akutagawa (1892-1927) -que por primera vez se presenta en español- y que es una de las estrellas de la literatura japonesa del siglo XX.

DB: Eso beneficia a los lectores de esta parte del mundo, porque nadie conocía este texto en español de Akugatawa sino hubiera sido por la traducción que Coroto presenta hoy.

¿Buscan convertirse en una revista elitista?

DC: Queremos una revista que premie la creación y el arte. Ya habrá una cabida bastante justa de algo académico, pero que gire en torno a la literatura. Queremos que esta revista gratuita se convierta en una muestra de democracia literaria. Ya sea por la selección de textos que hemos hecho o porque estamos regalando literatura de la buena. Presentamos a un grupo de personas que, si las compras por separado, te podrían costar entre 80 y 150 dólares en libros. Por eso me parece que esto es como si Coroto te regalara un compacto con una selección con la que, de repente, más adelante te puedes hacer seguidor de uno o de todos los escritores de la revista.

¿No habrá espacio para escritores nóveles en Coroto?

DR: En este número hay unas firmas nuevas: Manuel R. Montes, Nerea Dolara Hernández y Bárbara Mingo Costales, porque sus textos cumplían con la calidad deseada. Supongo que ese es el premio de la gente que está comenzando: haber pasado los filtros para llegar a figurar con el resto de escritores.

DC: No sé si después nos volvamos una especie de caza talentos y descubridores. Ojalá.

¿Qué tipo de contenido tendrá entre manos el lector de Coroto?

DR: El lector encontrará un dossier dedicado al “fin de la inocencia”, ilustraciones, fotografías, crónicas, poesía, cuentos, fragmentos de novela, reseñas, ensayos, traducciones y entrevistas.

DB: Los títulos de las secciones tampoco serán los acostumbrados: El Mentidero, será la sección de ficción; la de poesía, A puro verso; la de crónicas, La pura verdad; la de traducciones, Casa Babylon; la de las ilustraciones y fotos, Sala de Paso; y otra de trabajos más inclasificables que se llama Corototeca.

DC: La primera meta que nos pusimos era que esta revista no se pareciera a la RGR que ya hicimos, físicamente hablando. Esa fue la misma decisión que tomamos cuando se nos encargó el proyecto de la RGR en UTEP: que se diferenciara de sus predecesoras. Eso lo logramos creando un diseño muy particular, bonito, ordenado. Estas son las mismas características que queremos destacar en Coroto. Una cosa que sí queremos rescatar de nuestro antiguo proyecto es la distribución de la revista: depositarla donde quiera que vayamos. Haremos distribuciones muy particulares, esas que se mandan a escritores, editoriales o similares, dentro y fuera de Estados Unidos; aunque claro, para eso también se necesita un dinero que estamos buscando como locos.

¿Si los lectores se quieren subir a este proyecto, cómo lo pueden hacer?

DR: A través de kickstarter.com, donde pueden hacer donaciones a nuestro proyecto. El dinero no lo darán de gratis. Por ejemplo, si nos donan un dólar, les haremos un agradecimiento público a través del Facebook y del sitio web. Por $15, se harán acreedores a una copia de la revista. Por $25, un separador, una calcomanía y la revista. Por $50, salen sus nombres publicados en la revista y también les enviamos un ejemplar. Por $100, les mandamos su revista con una portada personalizada. Hasta ahora, a punta de amigos y familia, hemos recolectado cierta suma, que desde luego servirán para pagar a la diseñadora, que consideramos del equipo y que es la única que cobra “simbólicamente”: Miriam Luque, la cuarta corota. También nos pueden buscar para informarse mejor de las donaciones en Facebook, Twitter o en revistacoroto.com.

¿Dónde piensan hacer el lanzamiento oficial de la revista?

DR: El primer sitio será en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara adonde Centeno irá a presentar su libro. La podrán encontrar en el aparador de la Universidad Autónoma de Nuevo León. El 20 de diciembre se presentará en Medellín, Colombia. También fuimos invitados a San Luis Potosí, México, en mayo del próximo año, para ir a presentar Coroto y hablar de la labor de edición. En mayo o abril visitaremos la librería McNally Jackson de Nueva York. En marzo quizás inventemos algo en Chicago. De repente, se arma una cosa en El Paso. No me extraña que Monterrey nos prepare otra movida más adelante. El segundo número es probable que se presente en Japón, porque será dedicado a las letras niponas y editado por el escritor Ednodio Quintero, pero dudo que estemos presentes… A menos que aparezca un samurái muy desprendido.

¿Cómo se sienten ahora que la revista está lista?

DC: Sí se acerca mucho a lo que esperábamos, pero el tema es que uno nunca puede ser conformista. Queremos una revista al estilo de los Beatles, quienes en cada disco superaban al anterior. Pese a todo, estoy seguro de que si le preguntas a Paul McCartney, él te va a decir que los trece álbumes que sacaron son buenos y los ama con la misma fuerza. Queremos que Coroto sea así.

Martín Letona (San Salvador, El Salvador, 1980) es un escritor y periodista freelance radicado en El Paso, Texas. Trabajó como reportero multimedia en Contrapunto.com.sv, El Faro.net, La Prensa Gráfica y Clic.org.sv. Es becario del Bilingual MFA Program in Creative Writing de la Universidad de Texas en El Paso.

No hay comentarios: