lunes, 18 de enero de 2016

“TALLER DE POESÍA” A CARGO DE MIGUEL ILDEFONSO.



TALLER DE POESÍA

A cargo de Miguel Ildefonso

Fechas: sábados 30 de enero, 6, 13 y 20 de febrero.

Hora: 6:00 p.m. a 8:00 p.m.

Lugar: Calle Toribio Pacheco 352, departamento 101. Santa Cruz. Miraflores.


Cel: 992310324


viernes, 15 de enero de 2016

“TEXTO DE CEREMONIA DE PREMIACIÓN” POR MIGUEL ILDEFONSO.



“TEXTO DE CEREMONIA DE PREMIACIÓN”

Por: Miguel Ildefonso

La poesía es como transportarse en Lima día a día, un arduo trabajo no remunerado. Pero así como de pronto se puede avistar a una hermosa chica en el asiento de la otra fila, en el paradero esperando su combi, o ser testigo de un acto de humanidad, caridad, solidaridad o desprendimiento, en esta Lima la horrible, así también puede haber noches como esta en que el poeta puede decir que vale la pena seguir escribiendo.

Hablo de mi experiencia. Yo empecé escribiendo sin saber si publicaría algún día. Luego, al conocer a Luchito Hernández, a Fernando Pessoa o a Martín Adán, supe que si mi obra era buena, después de muerto podría alguien sabio y con plata llegar a publicarla. Pasó un tiempo y otra de las primeras lecciones pero terriblemente duras que aprendí era que no siempre sucedía así. Y lo más desolador, lo más traumático, era que nunca llegaría a ser como Luchito ni como Pessoa ni como Adán.

La última lección de esos primeros años de mi escritura, era que debía trabajar muy concienzudamente para ser yo mismo. Y, por otra parte, ver la manera de publicar. En esos años iniciales de la década del noventa conocí a poetas de mi edad o que frisaban o rondaban por ahí, y con espíritus afines. Una mañana iba en el Chosicano a la Universidad La Cantuta con Carlos Oliva. Nos habían invitado a un recital. Carlos era el verdadero poeta maldito del grupo Neón, el resto éramos solamente unos fans de Baudelaire, Rimbaud o Kerouac. La figura de Carlos podía ser intimidante para quien no lo conociera. Con su metro ochenta y rasgos felinos, tenía una postura permanente como si estuviera dispuesto al ataque. Pero entre los poetas, entre sus amigos del grupo Neón, y no era una pose, era como el más chiquillo.

Había un aprecio mutuo, y yo sé que me respetaba también porque me iba formando académicamente; cosa que en aquel entonces trataba de que no sea notorio, pues yo quería ser el más maldito de todos. En ese viaje a Chosica, de entre sus hojas impresas de poemas sacó uno que era un texto breve, se titulaba Epitafio, y me dijo muy sereno: “Miguel, esto quiero que vaya en mi tumba”. No pasó mucho tiempo y él murió trágicamente en una de las avenidas de Lima. Igual como murió un año después, en 1994, otro amigo del grupo, Juan Vega. Gracias a Paolo de Lima, otro miembro de Neón, salió publicado póstumamente el libro que Carlos dejara inédito, Lima o el largo camino de la desesperación. Lamentablemente no ha ocurrido eso con la poesía de Juan Vega, pues la familia prefirió dejarla en la privacidad.

Quiero agradecer, por eso, a la Asociación Peruano Japonesa por organizar este concurso, por hacer que aun persista en este oficio o karma que es la escritura. Gracias al premio José Watanabe Varas por dar la oportunidad, a poetas y escritores como yo, de poder difundir esa pasión que muchas veces es secreta e incomprendida.

Por mi parte quiero que sea un homenaje para el poeta José Watanabe, a quien tuve la suerte de conocer un poco, pero lo suficiente para aprender de él no solo de su gran poesía sino de su humildad, esa naturalidad de ser poeta y esa sinceridad en su sonrisa.

Quiero agradecer a mi familia porque sin su apoyo tampoco hubiera persistido, soy solo el menor de siete hermanos. Ellos siempre han estado allí. Aunque esta vez mi padre ya no está para recibir el premio por mí. Y es que en las ceremonias de premiación de los concursos nacionales que tuve la suerte de ganar, estuve fuera del país, y mi padre era quien recibía el trofeo por mí. Esta vez yo lo recibiré por él. Y él se lo hará llegar a mi madre. Porque es por ellos que escribo, quienes me enseñaron realmente a persistir contra viento y marea en mis ideales.

Calle NN. 14-01-2016


jueves, 7 de enero de 2016

miércoles, 6 de enero de 2016