miércoles, 25 de junio de 2014

REYNALDO ARENAS: “AHORA MÁS QUE NUNCA EL PÚBLICO PERUANO NECESITA LEER”.


En la foto: Reynaldo Arenas y César Pineda.

ENTREVISTA.

REYNALDO ARENAS: “AHORA MÁS QUE NUNCA EL PÚBLICO PERUANO NECESITA LEER”

Por: César Pineda Quilca

Hace un tiempo atrás, en la década de los 90, cuando apenas era un adolescente lo había visto actuar en la televisión como un personaje más de uno de mis programas favoritos: “Los de arriba y los de abajo”, una telenovela en la cual también participaba el recordado Chamochumbi. Desde esa fecha hacia adelante solo pude conocerlo a través de su nombre o una imagen que salía en una pantalla, afiche, revista o diario. Nunca antes lo había visto actuar en las tablas. Hasta que por fin pude verlo, cerca de mí, el día menos esperado. Y es que a decir verdad y aunque usted no lo crea, el reconocido actor, Reynaldo Arenas se encuentra en Vitarte impartiendo clases de teatro en el Centro Cultural de Ate.  Por esa razón, decidí ir a su encuentro, quizás con el único pretexto de saber más cosas sobre el trabajo artístico de una destacada figura de nuestro teatro nacional. He aquí el registro de una plática en el transcurso de un día memorable.

-Reynaldo, buenas tardes, ¿cómo estás? ¿Cómo te encuentras?

Bien, bien, aquí trabajando como ves, haciendo toda una revolución cultural en Ate, en este complejo cultural que se ha creado y que nos está dando cabida para que logremos incentivar en la gente joven lo que es la práctica del arte, no solamente el teatro, sino también la pintura, la música, la danza, la literatura. En fin, todos los mecanismos para que el joven se acerque al arte.

-Cuéntanos, ¿cómo nace este proyecto de llegar hacia acá?

La señora Ana Esquivel, que es una actriz y psicóloga, me invita a formar parte de este staff de profesores y me pareció interesante la propuesta, sobre todo, aquí en Ate donde prácticamente no se ha visto nunca una manifestación artística de fomentar arte, danza y cultura. Yo creo que el alcalde y Ana tuvieron una idea muy acertada en favor de la cultura. Me llamaron y me propusieron para ser profesor de teatro y dije: bueno, muy bien, encantado ¿y qué días? Me señalaron un día domingo y la verdad es que estoy muy feliz, porque estamos haciendo una verdadera preparación actoral para los chicos y los jóvenes.

-El día de hoy hemos visto que has estado trabajando “lectura y representación”.

Sí, de una obra infantil que pensamos hacerlo para Navidad. Tú sabes que el teatro es un trabajo muy minucioso, muy artesanal. Estamos tratando de montar “El patito feo” con un gran mensaje, una obra musical donde los chicos van a poder cantar, actuar y bailar.

-Volviendo a tus inicios, ¿cómo descubriste ese amor y pasión por el teatro?

Bueno, eso viene desde muy chico. Yo creo que desde la primaria en las veladas artísticas cuando uno salía a representar en el escenario personajes de nuestra historia como Bolognesi, A. Ugarte, por el día de la madre u otro movimiento cívico. En cada actividad cívica yo siempre levantaba la mano para formar parte de esta actividad. En la secundaria también se hizo un hábito formar parte de cada velada artística y ya, prácticamente, en la adolescencia conocí a mucha gente vinculada al teatro como la familia Travesí. Luego entré a trabajar como auxiliar de educación en un colegio superior donde conocí a un extraordinario hombre de teatro: el señor Guillermo Ugarte Chamorro que era el director del teatro de San Marcos y nos hicimos muy amigos. Prácticamente, él, me fue ayudando para despertar un poco esa vocación.

-Tú eres actor, pero ahora en estos momentos estás actuando en realidad como profesor, una profesión muy noble, por cierto. Dime, ¿es difícil enseñar teatro?

Sí, sí, sí. Es difícil, porque la gente no está preparada para la cultura. Todos los jóvenes se inclinan mucho por el deporte, por la música, por el canto y por el teatro, no. Sin embargo, hemos encontrado verdaderos talentos, gente que tiene capacidad de poder representar un personaje y estamos cada día nosotros asombrados porque vemos chicos desde 5 años hasta personas de 60 años que vienen con una gran vocación artística y con gran interés de hacer algo en el teatro. A mí me ha sorprendido este local donde a diario encontramos gente muy talentosa. Simplemente, están buscando una oportunidad para poder desarrollarse.

-Entonces, ¿existe algún grupo de teatro que se esté gestando bajo tu dirección?

Estamos con la idea de formar un elenco municipal de teatro. Eso se va a lograr tal vez a partir del próximo año ya. Estamos buscando talentos, estamos buscando gente que sirva para el teatro, gente valiosísima. Esto va a demorar un tiempo. Yo creo que para el próximo año ya tendremos forjado un primer elenco municipal de Ate.

-A modo de reflexión, ¿uno nace o se hace actor?

Se nace y se hace (las dos cosas). Uno puede tener talento, pero si no va a una escuela a que te preparen, a que te pulan, ese talento se desperdicia.

-¿Qué cualidades o características debe de tener y/o poseer un actor?

Disciplina, constancia, perseverancia, pasión, amor por lo que tú haces.

-¿Más allá del esfuerzo y el empeño que uno pueda poner?

Claro, y también digamos, una entrega total porque el teatro te exige mucho, mucho sacrificio. El teatro es una disciplina muy seria que requiere muchas horas de tiempo.

-¿Cómo ves el teatro nacional?

Muy bueno. El teatro nacional se ha puesto los pantalones largos. Hemos visto a muchos grupos de teatro que han asistido a muestras grandes. Hace dos semanas yo he estado en un festival en Villa El Salvador donde hemos visto a una gran calidad de gente que está ahí.  Hay un grupo que se llama “Arena y esteras”. En Comas está el famoso FITECA (FESTIVAL INTERNACIONAL DE TEATRO EN CALLES ABIERTAS). El teatro peruano está pasando por un buen momento.

-¿Qué función o papel cumple el teatro en nuestro ámbito local?

El teatro no es solamente entretenimiento. El teatro sirve para educar, también un poco para informar la realidad.  Y eso es lo que está pasando en el teatro. El teatro peruano informa mucho sobre su realidad y eso es importante.

-¿Qué le falta al teatro para tener una mayor presencia nacional?

Una mayor cabida en nuestra sociedad, no solamente aquí en Ate. Todas las municipalidades deberían tener centros culturales, todas las universidades deberían tener un centro cultural, espacios donde se desarrolle el teatro. Los colegios, los clubes particulares deberían tener un recinto donde la gente aprecie, incentive y practique el teatro, pero, lamentablemente, no pasa eso.

-¿Qué relación encontramos entre teatro y personalidad?

Mucha. El teatro te ayuda a desarrollar tu personalidad. Te forma como persona, como ser humano y te acerca a un mundo más sensible y a una conducta humana muy clara en el sentido de valores. Te inculca muchos valores: disciplina, constancia, perseverancia, voluntad, esfuerzo, tenacidad, todas esas cosas.

-¿Qué tan importante pueden resultar los monólogos?

Muy importante. Acá yo estoy trabajando un unipersonal “El prestamista” de un autor chileno. Es interesante porque hablas solo en el teatro. Hay que trabajar bien los personajes y definirlos. Es un trabajo intenso porque hay que aprenderse alrededor de 75 páginas y hablar solo. Es muy gratificante hacer un trabajo sin recurrir al compañero. Prácticamente, eres tú, solo en el escenario, tratando de convencer a un público.

-Muy aparte de la concentración y la memorización, ¿por qué se debe trabajar bien los diálogos?

Porque es necesario. En el teatro “la palabra es la madre soberana del espectáculo”. Por eso existen los grandes dramaturgos y ante un buen texto y ante una buena construcción gramatical un buen actor lo disfruta muchísimo.

-Desde tu experiencia personal, ¿cómo se podría enseñar arte en las escuelas?

Antes, me acuerdo que hace unos 15 años o más, había una ley que nos permitía promover el arte en los colegios. Había lo que se llamaba “Educación por el Arte” donde enseñábamos teatro, música, pintura, danza, folklore, pero no sé porque lo cortaron y ya no existe eso. Ahora, repito, el arte es peligroso para muchos gobernantes porque a través del arte se despiertan conciencias y mientras más tengan a un pueblo adormecido va a ser mucho mejor para ellos. Por eso, va a ser difícil que promuevan el arte.

-¿Cómo ves la cultura aquí en Ate?

En Ate, distrito bastante grande, se ha desarrollado muchísimo. Vemos acá que se está cultivando mucho lo que es el cine (el cine clásico) con entradas gratuitas, se acerca ahora la sinfónica, el ballet nacional, cosa que solamente se presentaba en Miraflores. Se han abierto las puertas para un montón de actividades artísticas y culturales. Veo que está muy interesante esta actividad que está realizando el alcalde.

-Hablemos un poco de un tema que nos preocupa, ¿qué representa para ti la lectura?

Es indispensable en todo muchacho, en todo ser humano. Ahora más que nunca el público peruano necesita leer. Yo creo que a través de la lectura solamente podemos ir conociendo muchas cosas, pero, lamentablemente en nuestro país los libros son, a veces, inalcanzables. Uno va a las librerías de Miraflores, del centro de Lima  y un libro está pues, por encima de los 60, 70 soles que muchos jóvenes no pueden comprar. Y es más un obrero cómo puede comprar un libro a su hijo. Por eso, a veces yo aplaudo un poco la piratería en ese sentido, porque nos permite acercarnos a ciertos autores por 5, 6, 7, 8, 10 nuevos soles y comprar libros. Debería haber leyes que favorezcan un poco el movimiento literario en nuestro país y la lectura, sobre todo.

-¿Y qué es un libro?

Es un arma vital, un arma poderosa. Es un alimento que el hombre debe de tener constantemente así como el pan, como la leche, como el pescado. Un libro es importante en cada ser humano.

-Ahora que estamos hablando sobre la lectura y el libro, ¿qué libros y autores recomendarías?

Básicamente, creo que “La Biblia”. Todo ser humano debe de acercarse a la palabra de Dios y luego acercarnos mucho a nuestra literatura peruana. Nosotros tenemos grandes escritores: Vallejo, Arguedas, Valdelomar, Scorza, López Albújar, Ciro Alegría, etc., que deberíamos estar siempre, permanentemente, leyéndolos constantemente. Sin embargo, no se estimula a eso, desgraciadamente.  No hay un hábito por la lectura y vuelvo a insistir también: “los libros son muy caros”. No hay mayores bibliotecas, no hay mayores librerías. Solamente las pequeñas librerías están en el centro de Lima y Miraflores. No existe una librería buena acá en Ate, en Comas, en Villa el Salvador donde está el gran conglomerado de gente. Eso también dificulta un poco que la gente joven tome conciencia de las cosas. Nos bombardean demasiado con la televisión. Los jóvenes están muchas horas inmersos viendo tv. y no tienen tiempo para leer porque están dopados con este aparato. Entonces, eso también hay que cambiarlo.

-Por lo que acabo de escuchar, ¿tienes un gran apego por la lectura y la literatura?

Me gusta mucho, porque estoy muy identificado con la palabra. El actor debe de estar siempre, constantemente leyendo, viendo nuevas formas de expresión teatral, buscando nuevos autores para darlos a conocer. El actor debe de estar siempre leyendo para no tener “esa ausencia” de lo que está pasando en el mundo.

-¿Qué libros de formación teatral recomendarías a una persona que quiera iniciarse en el mundo del teatro y la actuación?

Hay un libro básico que todo actor debe leer y es “La preparación del actor” de Konstantin Stanislavski. Luego está Richard Wagner con "La gran lección teatral",  “La estética” de Ortega, “La historia del teatro universal” de Silvio D´amico, “Hacia un teatro pobre” de Jerzy Grotowski. En fin, son los libros principales que todo actor debe poseer y leer.

-¿Qué escritor peruano te conmovió?

A mí, César Vallejo. Vallejo me ha conmovido mucho. Pienso que es uno de los más grandes escritores que existen en el mundo. Hay otros grandes, también. Otro que me ha conmovido mucho es José María Arguedas. Arguedas es otro representante de la idiosincrasia peruana. Es un indio muy orgulloso de ser indio y gracias a él conocemos muchos mitos y leyendas. Es otro gran escritor. Parte de sus obras las tengo siempre como un libro de cabecera.

-Y de los dramaturgos tanto nacionales como extranjeros, ¿quién te conmovió?

A mí me gusta mucho, Shakespeare. Es uno de los más grandes dramaturgos que existen en el teatro universal, pero también tenemos a los dramaturgos norteamericanos como Tenesse Williams, Oneill. Están después los suecos como Strimberg, está García Lorca en los españoles, en fin. Entre los peruanos me gusta mucho Alonso Alegría que tiene cosas muy buenas. Entre los clásicos Manuel Asencio Segura, Carlos Augusto Salaverry, Yerovi, etc. Hay una dramaturgia. Lo que no hay, últimamente, son dramaturgos peruanos. Se ha descuidado mucho en ese sentido. Siempre estamos recurriendo a dramaturgos argentinos, mexicanos, venezolanos, pero hay una gran ausencia de dramaturgos peruanos.

-Algún caso de un dramaturgo peruano que no haya sido revalorado.

Sí, por ejemplo, ya no se habla mucho de este dramaturgo que ganó un premio en Casa de las Américas: César Vega Herrera que es un gran dramaturgo olvidado, después está César de María que tampoco ya no escribe mucho, algunas cosas de Sara Jofré que escribió pero no se pone mucho en escena (lamentablemente no hay muchos dramaturgos peruanos en este tiempo) y José Luis Adrianzén que ha vuelto últimamente con cosas muy buenas y es el más contemporáneo.

-¿Qué opinión te merece el teatro campesino de Víctor Zavala Cataño?

Uf, marcó una época. Yo gané muchos premios como director de teatro en La Garcilaso haciendo “El cargador”, “La gallina”, “El collar” que fueron, digamos, mi formación como director de teatro.

-Tocando un poco el tema del teatro del absurdo y de alguno de sus representantes: S. Beckett, E. Ionesco, V. Piñeira, ¿se ha puesto en escena algún trabajo de estos autores en nuestro medio nacional?

Hemos hecho mucho teatro de este tipo acá. Yo he realizado “La lección” de Ionesco que fue un teatro que prácticamente estuvimos dos años haciendo giras por todo el país. Se ha perdido mucho eso del teatro del absurdo. Ahora últimamente Lima se ha abocado a la gran comedia. O sea, la gente va al teatro a entretenerse, a quitarse todo el estrés y a reír a carcajadas, pero yo considero que eso no es teatro. El teatro debe invitarte a la reflexión, a la meditación, a la toma de conciencia.

-En este caso, una vuelta al teatro clásico griego.

No tanto al teatro clásico, sino al teatro que te invite a la reflexión, que te invite a que salgas tú movido y que te diga: “bueno, cuál es mi posición, cuál es mi compromiso con la sociedad en este momento, qué debo hacer para que este país mejore, cuál es mi labor como ciudadano, tratar de inculcar a la gente que sea más educada, que no miccione en la calle, que no bote papeles, que mejore su léxico, que los jóvenes tengan horizontes, metas, escuelas para padres, que la televisión no se convierta en una niñera en los hogares”. En fin, tantas cosas.

-¿Qué comentario te genera el teatro de Bertolt Brecht?

Bertolt Brecht marcó una época en el Perú.  Antes se hacía mucho teatro de Brecht, pero -no sé si por desconocimiento o por temor- ya se ha dejado de hacer. Brecht está considerado como uno de los más grandes dramaturgos contemporáneos. En Italia, Francia, Alemania, Estados Unidos, acá incluso en Buenos Aires, Sao Paulo, se sigue haciendo teatro de Brecht con bastante frecuencia. Lo malo, pues, es que Brecht tiene una política bien marcada, es marxista 100 %. Entonces hay gente que tiene mucho temor hablar del marxismo, del comunismo. Y es que despertar conciencias a mucha gente no les gusta, quizás por ello, algunos lo toman como un teatro panfletario.

-Volviendo al panorama nacional menciónanos qué otros festivales se organizan en nuestro país.

Están las famosas muestras de teatro universitario, después tenemos constantemente en Comas, Villa El Salvador, Cusco y Piura. Hay pequeños festivales que no tienen mucha sonoridad porque los medios no nos apoyan. Lamentablemente para muchos medios el teatro no es nada recomendable. Sin embargo, apoyan qué. En varios diarios vemos: “Se casó Susy Díaz”, “Florcita se peleó con su marido” y otras cosas más. Eso promueven los medios, desgraciadamente. No hay un interés de los medios o las revistas por difundir el movimiento cultural en nuestro país.

-Persiste aún la dominación de lo que hablaba Augusto Salazar Bondy en uno de sus libros.

Todavía seguimos siendo nosotros colonias a control remoto de las grandes potencias que hacen lo que les da la gana con nuestra juventud y nos meten a la fuerza cosas y tenemos que aceptarlo porque nadie protesta, no.

-¿Qué apreciación tienes sobre el trabajo cultural que ha venido desarrollando nuestra infatigable Delfina Paredes a lo largo de todos estos años?

Delfina Paredes es una de las más grandes actrices que tiene el Perú en este momento. Ella formó parte de una asociación cultural “Histrión”, teatro y arte con su esposo. Yo he asistido a muchos espectáculos donde ella intervenía: “La chicha se está fermentando”, “El fabricante de deudas”, en fin. Últimamente, se puso a trabajar sobre la poesía de Vallejo. Ella ha declamado muchos poemas y se ha convertido, prácticamente, en una de las actrices que ha difundido Vallejo por todo el país, incluso el extranjero. Tuvo su paso por la televisión con “Evangelina”. Yo la aprecio mucho. Es una gran actriz que todavía queda en el Perú. Es una persona muy humana, buena amiga, sindicalista al 100%, defensora de todos los derechos de los actores. Es una pena no tenerla en actividad, pero así es este país, desgraciadamente. A los grandes valores los tiene, un poco, olvidados.

-Así como Delfina Paredes recita y declama poemas de Vallejo, tú has prestado tu voz para realizar un videopoema con un texto de Miguel Ildefonso: “José María” en homenaje al autor de “Todas las sangres”. ¿Qué tal resultó esta experiencia?

Sí. Ildefonso un día me habló sobre un proyecto que tenía para narrar unos cuentos de algunas narraciones de Arguedas. Así que un día nos juntamos en un estudio y narramos un escrito por él donde prácticamente todo salió muy bien. Mucha gente incluso me llamó por teléfono para felicitarme, sobre todo, el año 2011 donde se cumplieron los 100 años del nacimiento de Arguedas.  Ese vídeo fue visto por una gran cantidad de gente en YouTube. Bueno, tuve la oportunidad de hacer este bonito trabajo para Ildefonso.

-¿Qué sensaciones te produce actuar frente al público?

Es hermosa, porque al final los aplausos son la retribución a tu trabajo. Luego siempre hay un diálogo, una conversación, lo cual te demuestra que la gente está sedienta de mucha cultura.

-Ya para finalizar, ¿qué recuerdos tienes de “Los de arriba y los de abajo”?

Fue una novela que marcó una época en el Perú. Marcó un hito porque se planteaban cosas bien definidas con respecto a lo que era ese momento: “la idiosincrasia peruana”. Se hablaba mucho del cholo emergente en este país. Ya el cholo no solamente se ve en las chacras, sino que el cholo está en el Ejército, está en la Marina, incluso ha llegado a la presidencia. Eso era un poco hablar de “Los de arriba y los de abajo”.

-Algunas palabras finales…

Agradecerte por esta oportunidad y, bueno, hacer un llamado a todos los jóvenes que se acerquen aquí, al Centro Cultural de Ate. Estamos haciendo teatro y los que tengan esta vocación de actuar vengan, que los vamos atender muy bien.

-Muy bien, Reynaldo, ha sido un gusto dialogar contigo y será hasta una próxima oportunidad. Un gran abrazo.

Muy amable, hermano, muchas gracias.

DATOS BIOGRÁFICOS:

*Reynaldo Arenas Horna (Lima - Perú): Es un actor de teatro, cine y televisión.

**César Pineda Quilca (Lima – Perú): Es docente, poeta, promotor cultural y animador de la lectura. En la actualidad se dedica a organizar ferias de libro en diversos colegios del distrito donde vive: su Ate querido.

Nota:

-Usted puede escuchar  el poema “Telúrica y magnética” con la voz de Delfina Paredes: http://www.youtube.com/watch?v=uFzeQWhN3vE

-Usted puede escuchar  el videopoema “José María” con la voz de Reynaldo Arenas: