lunes, 18 de agosto de 2014

ENTREVISTA A JULIÁN QUISPE ICHPAS POR CÉSAR PINEDA QUILCA.


Julián Quispe Ichpas, un auténtico y generoso librero. Foto: C.P.Q.

El público lector. Foto: C.P.Q.

ENTREVISTA.

“HACER LEER LIBROS A LA GENTE ES HACER UN BIEN A LA HUMANIDAD”

Por: César Pineda Quilca

Son las 10:30 a.m. y mientras voy caminando a duras penas por una transitada avenida de “Los Ángeles” en Ate, a lo lejos, logró divisar en una esquina de la calle a una persona humilde y generosa obsequiando libros en una moto que él mismo ha diseñado. Su nombre es Julián Quispe Ichpas, un abnegado librero de 65 años, quien todas las mañanas sale de su casa de Seremsa llevando libros de remate -desde un sol hasta fiadito- a los vecinos de Santa Anita, Ate, Ceres, Santa Clara, Huaycán y Ñaña. Para conocer más de cerca la vida de este hombre huancavelicano que promueve la lectura decidí conversar con él y he aquí las respuestas que brotan desde lo más profundo de su corazón.

¿Desde hace cuánto tiempo te acercaste a los libros?

A los libros (recuerda). Yo soy librero desde los l6-17 años de edad en que llegué a Lima, pero nunca supe que estaba ahí parado en el tesoro. ¿Acaso había leído algo? Nada. No había leído nada hasta los 52 años. Era ignorante, encegado, machista.  Desde que empecé a leer “La Biblia” y los libros es como si estuvieran abierto mis ojos.

¿Y cómo así te decidiste a vender libros?

Desde que he llegado a Lima siempre me gustó ser negociante. Mi ilusión era vender revistas, libros, pero no sabía nada del contenido del libro. Era ignorante, pues nunca antes nadie me había dicho que estudie. Sin embargo, ahora que estudio y he aprendido a leer estoy leyendo y todo es diferente. Desde que empecé a leer es como si el mundo fuera tuyo.

En otras palabras, ¿tu vida ha cambiado?

Sí. Y es que ahora no solamente estudio, sino que también hago otras cosas que no hacía antes.

¿Como a leer y ver la vida de otra manera?

Así es, porque los libros siempre te comunican algo.

¿Y qué te dicen los libros?

“Atrévete hacerlo y lo harás”, por eso me admiro de estar estudiando 1ro de secundaria y de haber aprendido a leer libros por mí mismo. No sabes lo hermoso que es ser estudiante.

En esa etapa de estudio y descubrimiento, ¿qué libros has leído?

He leído obras de Aristóteles, Platón, Sócrates, Víctor Hugo, Miguel Ángel. A esos hombres Dios les ha dado sabiduría. Haciendo un análisis, creo que ellos han leído “La Biblia”.

Desde tu óptica, ¿por qué es importante leer?

Porque es algo muy interesante. Porque te sacas la venda de tus ojos y la cadena de tu mentalidad. Porque sabes que una persona que no lee nunca no sabe nada y se morirá sin saber nada. Pero cuando lees, aprendes. Todo libro te da un consejo que nunca has sabido. Por eso es muy necesario que en nuestro país debamos leer toditos. Toda la humanidad debe leer para que la ignorancia no exista. Por culpa de la ignorancia cuántos niños están como están.

Según tu propia experiencia, ¿la gente compra libros?

Sí compra libros. La gente quiere libros totalmente. A veces la gente no compra porque cuesta mucho dinero. Tiene que tener posibilidades para que compre. El gobierno debe dejar libros masivamente en Costa, Sierra y Selva. Con eso se puede combatir la ignorancia. Todo está en nuestro poder, en nosotros nada más. Todo se puede arreglar y cambiar mientras haya estudio.

¿Qué libros te solicita más la gente?

Salen más libros de inicial, de pensamientos y de valores.  El ser humano tiene que leer más libros de valores en estos tiempos. Tiene que leer bastante.

¿Qué es un libro? ¿Qué aporta a la sociedad?

El libro es una gran cosa en el mundo que sirve para adquirir la sabiduría y para hacer un bien a la humanidad. Esa es la primera necesidad. Si no leemos nunca haremos nada, sufriremos en la oscuridad porque no sabemos nada. Si yo no sé, mi hijo no sabe, entonces habrá papá bruto, hijos brutos porque no vamos a saber nada. Hacer leer libros a la gente es hacer un bien a la humanidad y eso es lo más maravilloso en esta vida.

¿Qué anécdota se te viene a la memoria rápidamente?

Me han pasado muchas cosas importantes. Cuando yo he creado esta moto mi señora me dijo “cómo vas a ir como un niño a vender, ¿no te da vergüenza?”, pero yo había leído en un libro que el hombre debe de ser curioso como un niño. Yo estaré viejo, pero soy curioso, inteligente, hábil. Así que acondicioné mi moto y me fui a vender porque yo había leído en un libro “nunca tengas vergüenza, porque tú eres único en el mundo”. Entonces, me base en eso, lo hice y lo sigo haciendo.

¿Qué es lo más gratificante que te ha brindado este oficio?

No tengo cómo explicarte, porque todo en mi vida es admirable. Es para mí como un sueño. He ido al Cuzco, Ayacucho, Abancay con mi hijo. En un libro dice: “anda nomás, atrévete y si no te atreves nunca lo harás”. Mi esposa me decía “hay accidentes, no vayas, vas a morir”, pero mira como he vuelto, sano y salvo. En el futuro pienso ir en avión (sonríe).

Ya que hablas de tu familia, ¿alguno de ellos también se dedica a vender libros?

Sí, mis hijos y yo nos dedicamos a vender libros. Tenemos cinco motos y nos ganamos la vida tranquilamente. Lo que yo sé les he enseñado. Lamentablemente, antes por mi ignorancia, nunca pude darles estudio a mis hijos. Pero ahora es todo lo contrario. Con las cosas que yo estoy haciendo mi familia me sirve y cuando me sirven yo digo porqué me están sirviendo.

Sin embargo, ¿qué le puedes pedir a las autoridades? Me comentabas hace un rato que a veces no te dejan trabajar en las calles.

Las autoridades no dejan trabajar, no dejan vender. Esa es la primera necesidad en este país que dejen vender libros masivamente. Deben de haber miles de libreros más y acudir al libro para cambiar nuestra vida cotidiana. Cuando nos educamos, bonito vamos a vivir todos ordenados. Si no hay educación siempre estaremos fregados y moriremos ignorantes.

Ya para finalizar esta entrevista, ¿qué mensaje le darías a la población?

Que debemos leer siempre. Primero “La Biblia” y después otros libros. Ahí está la clave de la vivencia de nuestros días.

Algunas palabras finales.

Te agradezco por la entrevista. Me siento bien agradecido en esta vida. No estoy interesado tanto en el dinero, pero sí en vender libros. Muchas gracias.

Los amigos: César Pineda y Julián Quispe Ichpas. Foto: C.P.Q.


1 comentario:

German Rodriguez Aquino dijo...

Excelente entrevista a este buen librero, y ahora un lector de polendas. Creo, César, que a través de estas incursiones, buscando qué sacar lo mejor de las personas, estás logrando mejorarte a ti mismo, e incentivando a muchos otros, para el mejoramiento de sus actitudes y capacidades en su diario vivir.